jueves, 28 de noviembre de 2019

AGENCIA VENEZOLANA DE HIDROCARBUROS

Agencia  Venezolana  de Hidrocarburos ... Marca A.C.M.E.
Continuación de “El Cuervo, el pozo y el petróleo” [1]

Carlos Mendoza Pottellá
27/11/2019
Recapitulando mis argumentos: [2]

En el debate sobre el ineludible rescate y reconstrucción de nuestra arruinada y sitiada industria petrolera nacional están planteadas posiciones antagónicas, a las cuales me he referido en mis artículos anteriores, tomando el partido de la reinstitucionalización general de los hidrocarburos como patrimonio nacional, sometido a la administración y control de los poderes públicos nacionales, según las disposiciones constitucionales que rigen la materia.

Insisto ahora, refiriéndome a un instrumento para la liberalización y desestatización  de esa industria, que ha sido propuesto desde hace varios años por los epígonos de la supremacía del mercado y su mano invisible  sobre cielos y tierras petroleras: la “Agencia Nacional de Hidrocarburos”, la cual renace en estos momentos críticos, como Salvador con su arpa, porque… “la oportunidad la pintan calva” [3]

Como mencioné entonces, en su versión criolla, expuesta inicialmente desde CEDICE por el Académico Ingeniero Diego González Cruz  en sus “Propuestas para Venezuela”[4], queda claro el propósito de minimizar la injerencia de los poderes públicos constituidos en la determinación de las políticas energéticas y petroleras, su gestión y control, trasladando esas competencias a dos organismos “independientes del gobierno de turno, autónomos y autárquicos”:

Un “Ente Regulador” y una “Comisión Nacional de Energía”, caracterizados de la siguiente manera …

1. Proceder a crear el Ente Regulador de los Hidrocarburos, órgano del Estado, independiente del gobierno de turno, autónomo y autárquico, responsable de la administración, implantación y vigilancia del cumplimiento de las políticas públicas correspondientes, y regulación de las actividades; otorgar las licencias y permisos para abrir todos los negocios “aguas arriba y abajo”, elaborar la estadísticas, aplicar las multas, calcular y distribuir las regalías, entre otras actividades

2. Proceder a crear la Comisión Nacional de Energia (CNE), órgano del Estado, independiente del gobierno de turno, autónomo y autárquico, ente responsable de la elaboración de propuestas de políticas públicas para el Sector Energético y de velar por el éxito del propósito y objetivos de las mismas. Con el fin de garantizar un balance en las grandes decisiones y orientación de la actividad de la IPN, se debe incorporar a la CNE una representación significativa de los venezolanos, más allá de representantes del Estado, tales como las Empresas, Entes Financieros, Academias, Universidades, Gremios y Asociaciones y Sociedades civiles vinculadas al sector, entre otras, siguiendo un esquema organizativo y de trabajo como el existente en el exitoso “National Petroleum Council-NPC” de los EE.UU.

Para dar por sentado el despojo de las facultades ejecutivas y de control de gestión del actual Ministerio, se propone

3. Dar todos los pasos necesarios para tener un Ministerio de Energía Moderno, encargado de presentar las propuestas de políticas públicas a la Asamblea, promover la investigación y desarrollo en el sector, y representar al país en los asuntos internacionales en materias de energía… [5]

Es decir, un convidado de piedra que a lo sumo podrá realizar actividades decorativas, de promoción y  representación formal.

Esta es la madre del cordero de la propuesta introducida por el partido Voluntad Popular en la Comisión de Energía y Petróleo de la Asamblea Nacional, cuya descripción y crítica hice en “Proyecto de Ley para la regulación del comercio de esclavos en Venezuela”[6]

Para muestra de lo que trata este proyecto, que reproduce casi al calco la propuesta de González Cruz, transcribo los párrafos, referentes a lo que en él se denomina “Agencia Venezolana de Hidrocarburos”, versión modernizada, más a tono con las Agencias similares existentes en otros países petroleros latinoamericanos.

Artículo 65. Se crea la AVH, como órgano desconcentrado del Ministerio competente del sector de Hidrocarburos, con autonomía técnica, presupuestaria y administrativa. La Agencia tendrá a su cargo la implementación técnica de las políticas públicas del sector de Hidrocarburos, de acuerdo con las competencias que le asigna la presente Ley.

b) La AVH (Agencia Venezolana de Hidrocarburos) “responsable de la regulación de las actividades reguladas por la presente Ley” (vale decir, una supra-reguladora, nn), la celebración de los Contratos de Exploración y Producción, el otorgamiento de las autorizaciones para la realización de todas las otras actividades reguladas por esta Ley, la inspección, supervisión y administración de los títulos habilitantes que permitan la gestión de las actividades reguladas en esta ley y las que le serán transferidas en materia de gas natural no asociado. [7]

Como adelanté, esta “nueva” y autárquica Agencia Venezolana de Hidrocarburos se emparenta con las ya existentes en México, Colombia y Brasil, a cuyo desempeño debo referirme para poner de bulto su orientación, propósitos y realizaciones efectivas.

Todas ellas, surgidas al calor de la onda liberalizadora impulsada desde  el “Consenso de Washington”, están inspiradas en el National Petroleum Council de los Estados Unidos, según nos informa González Cruz:

 En mi Barriles de Papel No. 157 expliqué la estructura y objetivos de la mejor Comisión de Energía: el National Petroleum Council (NPC- https://www.npc.org/), fundado en 1946 para tratar asuntos de petróleo, pero que hoy cubre todas las energías. [8]

González Cruz muestra abiertamente el origen de este moderno NPC: La Comisión Reguladora de los Ferrocarriles de Texas (The Texas Railroad Commision TRC), organismo que desde 1891 representa los intereses de las corporaciones petroleras que operan en ese Estado de la Unión.

Hete aquí, pues, que la modernidad petrolera nos llegará desde organizaciones privadas cuya eficiencia se conoce desde hace 128 años en… los Estados Unidos.

Valga entonces la oportunidad para destacar, una vez más, que se trata del acomplejado desconocimiento y repudio de nuestra historia y de su jurisprudencia republicana, al querer trasladar instituciones semiprivadas, características de un país donde rige excepcionalmente el régimen de la “accesión minera”, el cual considera a las minas como un accesorio de la propiedad privada de la tierra, hacia países como los nuestros y el resto del mundo no anglosajón, donde impera, el régimen “regalista o dominial” [9], que reserva esa propiedad a la Nación, sea cual fuere su forma de organización política: república, confederación tribal, imperio, emirato o reino. Nación representada en todos los casos por sus particulares y específicas instituciones estatales.

El régimen de la accesión minera  siempre ha sido añorado por nuestros dirigentes petroleros aperturistas, herederos legítimos de las culturas corporativas concesionarias, Exxon Shell, Gulf, etc., quienes lo asocian a la modernidad, de la que fueron y siguen siendo portadores.

De hecho, el carácter de Sociedad Anónima que lograron imponerle a Petróleos de Venezuela en 1976, tuvo mucho que ver con las presiones que ejercieron desde AGROPET, asociación de ejecutivos corporativos que los agrupaba entonces, sobre la Comisión Presidencial que discutió el instrumento legal para la “reversión anticipada”... propiciada por las propias concesionarias.

Tal como he relatado en muchos trabajos previos, fue así como nacieron las 13 operadoras- espejo que las sustituyeron, cada una con su Junta Directiva integrada por los”nativos” que ya eran miembros de las respectivas  juntas directivas concesionarias.[10]

Según la visión que han tratado de insuflar en la dirigencia política, económica y académica del país, la desgracia de nuestra herencia absolutista española, y “tergiversación histórica del Decreto del Libertador Simón Bolívar de 1829”[11] fueron las que impidieron la proliferación Venezuela de grandes empresas privadas, del tipo Standard Oil, Texaco, Gulf, con Capitanes de Industria como J. D. Rockefeller, Andrew Mellon o J. P. Morgan. 

(En nuestro país, los émulos criollos de aquellos “tycoons” tendrían los apellidos de los caudillos regionales zulianos y orientales que se convirtieron, por sus “dotes competitivas”, en los grandes terratenientes)

En nuestros días, y en el caso venezolano, la “modernización” propuesta implicaría, simplemente,

“…el desconocimiento de todo el ordenamiento legal y constitucional  que regula las asociaciones con capitales extranjeros, ofreciendo completo sometimiento del país a la legalidad corporativa internacional, garantizando rendimientos y e intangibilidad de los contratos, anulando toda la capacidad del Estado-Nación venezolano para legislar y darle rango constitucional a esta materia.” [12]

En un intento por aprender de la experiencia de nuestros vecinos en esta materia, en el citado trabajo “Ecopetrol, fracking y mitocracia” [13] describí el comportamiento soberano de esta empresa, la cual, bajo los auspicios de la Agencia Nacional de Hidrocarburos de Colombia, se atrevió a enfrentar abiertamente la prohibición de las actividades de fracking, emitida por el Consejo de Estado de ese país, máxima instancia judicial en lo Contencioso-Administrativo. Ecopetrol recurrió de esa sentencia, pero la misma fue ratificada.

Entonces, y mientras tanto se logra torcerle la mano a esos juececillos, la ANH decidió que Ecopetrol debería utilizar los 1.500 millones reservados para inversiones, colocándolos en el “shale oil” de la Cuenca Pérmica norteamericana, y así “experimentar” con esa tecnología vetada…

Con el perdón de los lectores y del público colombiano por mi intromisión en asuntos que sólo competen a los ciudadanos de ese país, voy a extenderme en consideraciones sobre el funcionamiento de su ANH, para ilustrar lo que nos espera con la AVH.

Como dije, en todos estos emprendimientos riesgosos de Ecopetrol, incluida la participación, en asociación con Total, en la muy reciente y fallida subasta de lotes en el Presal brasileño, están las decisiones soberanas de la ANH.

Pero, ¿Qué es la ANH de Colombia?

En el 2003 se consolidó la reestructuración del sector hidrocarburífero colombiano con la creación de la Agencia Nacional de Hidrocarburos como respuesta a la situación crítica que atravesaba Colombia debido a la disminución de las reservas de petróleo, lo cual eventualmente, llevaría al país a convertirse en importador de crudo. Ver Decreto 1.760 de 2003…

Esta reestructuración contemplaba la decisión de hacer más competitiva a Ecopetrol al separar su doble rol de entidad reguladora y empresa petrolera. Por esta razón se dispuso que únicamente se dedicara a explorar, producir, transportar, refinar y comercializar hidrocarburos, es decir, trabajar exclusivamente en el negocio petrolero en todas las fases de la cadena, compitiendo en igualdad de condiciones con otras compañías del sector. (subrayado mío)

De esta forma, la Agencia Nacional de Hidrocarburos adquirió de Ecopetrol su labor de administrador y regulador del recurso hidrocarburífero de la nación, y comenzó la transformación de Colombia en un país nuevamente prospectivo y atractivo para los inversionistas nacionales y extranjeros. Sin embargo, Ecopetrol mantiene todas las áreas que tenía bajo operación directa y los contratos de Asociación firmados hasta diciembre 31 de 2003.[14]

Cualquier parecido con el proyecto CEDICE-Voluntad Popular in comento, es pura coincidencia. La diferencia está en que la ANH colombiana está formalmente adscrita al Ministerio de Minas y Energía, mientras que en la versión venezolana ni siquiera se sabe el nombre del Ministerio “que tendrá a su cargo los asuntos -meramente formales- en materia de hidrocarburos”.

La AVH, tendrá una autonomía superior, será autárquica, como dice el proyecto Baquero-López: se gobernará a sí misma.

El quid de la cuestión no es un asunto de nombres, sino un aspecto central de este proyecto: sacar toda la materia de hidrocarburos, líquidos y gaseosos (tal como establece en su disposición transitoria Nº 10)  del ámbito y las regulaciones de la administración central,  dado el carácter “descentralizado y autónomo” que se asigna a la AVH.[15]

Crucemos de nuevo la frontera:

La precisión de la evaluación de las perspectivas petroleras que Colombia 
ofrece a los inversionistas, se puede medir en la siguiente información de su ANH: 

Colombia presenta un régimen atractivo, estabilidad económica y política (entre las mejores de Latinoamérica), una Agencia plenamente operativa, una elevada confianza entre los inversionistas y un gran potencial geológico; considerando las reservas probadas, probables y posibles y los recursos prospectivos identificados en áreas en evaluación, exploración y producción, se alcanzarían los 10.400 MBPE (millones de barriles de petróleo equivalente). En relación con el potencial, éste se encuentra aproximadamente entre los 9.000 y 140.000 MBPE (millones de barriles de petróleo equivalente).​​​​ [16]

La magnitud del engaño al público colombiano y el despropósito de estas cifras, es evidente si las comparamos  con los datos oficiales reportados y registrados en la edición 2019 del BP Statistical Review of World Energy:

Reservas probadas de Colombia:  1.700 millones de barriles (0,1% de las reservas mundiales) las cuales, con un nivel producción anual de 316 millones de barriles como la de 2018, tendrán una duración de 5,6 años.  [17]

En tales condiciones, cacareando con un reciente descubrimiento en el Magdalena Medio de pozos con producción inicial de 600 barriles diarios [18], ¿A quién engañan ofreciendo protagonismos universales para Ecopetrol? Ya lo dije.

Esa misma alegría e irresponsabilidad se percibe en su evaluación de  la inversión de los recursos de la Nación colombiana en emprendimientos en el pérmico norteamericano y en las licitaciones de lotes en el Presal brasileño. En ambos casos, los resultados ya están emergiendo. Veamos:
El 24 de octubre, Ecopetrol anuncia haber recibido aprobación de la ANH:     

Ecopetrol anunció que el martes se recibieron aprobaciones regulatorias para el acuerdo con Occidental Petroleum para desarrollar tierras en el Pérmico.[19]

El 4 de noviembre, la candorosa Oxy revela sus generosos motivos:

Occidental Petroleum reducirá el gasto de capital para pagar la deuda. El productor de petróleo informa pérdidas trimestrales después de la adquisición de Anadarko por $ 55 mil millones.
La compañía estableció el lunes un presupuesto para no más de $ 5.5 mil millones en gastos de capital en 2020, por debajo de los $ 9 mil millones de este año. Occidental pronosticó que la producción de petróleo y gas crecería un 2% en 2020, muy por debajo del crecimiento del 5% previsto cuando acordó la adquisición de Anadarko por $ 55 mil millones hace seis meses.

Los productores de energía en toda el área de lutitas (shale) de EE. UU. se ven presionados entre los precios estáticos del petróleo y el gas y los inversores que buscan mejores rendimientos.

Los escépticos mercados de capital han obligado a muchos productores independientes a reducir la perforación, lo que ha llevado a una desaceleración en la producción en el país productor de petróleo más grande del mundo. [20]

Occidental Petroleum Corp.  registra la mayor pérdida en casi cinco años, después de un recorte presupuestario del 40%, lo cual ha hecho crecer la preocupación  sobre la capacidad del perforador de petróleo para elevar su producción lo suficientemente rápido como para reducir la deuda contraída a raíz de la adquisición de Anadarko Petroleum Corp.[21]

Ante esas pesimistas expectativas para Oxy ¡Bienvenidos sean los oportunos y baratos 1.500 millones de dólares del patrimonio público colombiano, con los cuales Ecopetrol pagará su alegre “experimentación”, mientras llega el momento de ajustar cuentas con el retardatario Consejo de Estado!

Y así, el 13 de noviembre de los corrientes:

Ecopetrol y Occidental Petroleum cierran acuerdo de inversión para desarrollo de fracking en EE.UU.[22]

Ello pese a que ya proliferaban las revelaciones de resultados  negativos en el área de incursión colombiana:

Oilfield Services Face Crisis As Shale Slowdown Worsens
22 oct. 2019: la primera y la tercera empresa de servicios de campos petroleros más grandes del mundo (Schumblerger y Halliburton) vieron sus ganancias golpeadas en el tercer trimestre debido a la desaceleración en el “shale”(petróleo de lutitas) de EE. UU. [23]

La crisis del shale lleva a la bancarrota a 200 empresas en EEUU
31 oct. 2019 - Un total de 192 productores de petróleo y gas en América del Norte se han declarado en bancarrota desde el año 2015, según un informe de la firma de abogados Haynes & Boone LLP, lo que implica unos 106.800 millones de dólares en deuda agregada.... [24]

Los argumentos de la ANH y Ecopetrol para realizar esas apuestas riesgosas en el área energética se fundamentan, paradójicamente, en el agotamiento de sus reservas probadas y la voluntad de ingresar a las “grandes ligas petroleras”, con inversiones para generar reservas… en África, Brasil, México y Estados Unidos.[25]

Así, a partir del acuerdo con Oxy, según los estimados de sus gerentes, Ecopetrol sumará 160 millones de barriles a las reservas de la compañía y se añadirá –para 2027- una capacidad de 95.000 bep diarios… en Estados Unidos.

Esas decisiones se han tomado con autonomía respecto a los poderes públicos colombianos, y enfrentándolos abiertamente, como en el referido caso de la prohibición del “fracking” dictada por el Consejo de Estado.

Pero también se han tomado con gran chapucería y ligereza, como apuestas de casino, usando el patrimonio público colombiano, a partir de pronósticos de mercado sin fundamento en la realidad, tal como lo muestran los recientes casos  aquí discutidos.

Nuevamente, es pura coincidencia el parecido de esta reláfica macondiana con la  “internacionalización” venezolana, luminoso emprendimiento con el cual, y a espaldas de los poderes públicos, la “gerencia profesional” de PDVSA inició un plan de adquisición de 17 refinerías en el exterior, la mayoría de ellas chatarras disfuncionales, cuyos propietarios las estaban ofreciendo en barata –menos de 7.000 millones de dólares en total- después de recuperadas, con creces, las inversiones realizada cuatro y cinco décadas antes. [26]

Este es el modelo ideal de la propuesta de CEDICE-González Cruz, López-Baquero-Voluntad Popular a la cual me he referido en mis últimos trabajos: Una Agencia emprendedora, audaz… a la hora de arriesgar lo que no es suyo.

Contra ese modelo liberal, que pretende manejar un patrimonio colectivo con autonomía respecto a la representación legítima de su propietaria, la Nación venezolana, es contra el cual me he manifestado insistentemente.
Esta posición no es, como pretenden en la otra acera, el producto de un extremismo estatista, sino que es concebida como defensa del patrimonio particular, individual y colectivo de todos los venezolanos, ciudadanos, menores y por nacer en las próximas generaciones.

Retomando el hilo comparativo:

El desempeño de las otras Agencias de Hidrocarburos citadas, Mexicana y Brasileña, aportan  muestras adicionales del funcionamiento de las políticas de liberalización y apertura de sus respectivas industrias.

La fallida licitación del Presal brasileño puede ser motivo para consideraciones particulares al respecto, pero, por ahora, sólo haré una breve referencia al caso mexicano.

Su liberalización fue inicialmente  limitada. La estructura de su Comisión Nacional de Hidrocarburos, establecida en 2008 –también dentro de la ola desestatizadora-  como “órgano desconcentrado de la Secretaría de Energía” limitaba sus atribuciones, delegadas por esa Secretaría, a establecer relaciones con los operadores privados, cumpliendo con el ordenamiento legal mexicano y las disposiciones de la propia Secretaría.

Sin embargo, la constante caída de la producción desde 2005 por el colapso de Cantarell y otros campos del Golfo, determinaron que…

En agosto de 2014, en un esfuerzo por abordar la disminución de su producción nacional de petróleo, el gobierno mexicano promulgó reformas constitucionales que pusieron fin al monopolio de 75 años de Petróleos Mexicanos (PEMEX). [27]

Según las expectativas de ese momento, La reforma energética podría aumentar la producción de petróleo a largo plazo de México en un 75% [28]

En los cinco años de vigencia de esa reforma desestatizadora, después de 11 licitaciones en 4 rondas, en las cuales se adjudicaron más de 40 lotes exporatorios, los resultados no permiten certificar el aumento pronosticado, demostrando que en materia de madurez y agotamiento de yacimientos petroleros los factores concurrentes son otros.

La producción cayó en 722 mil barriles hasta 2018 y las reservas aterrizaron ese año en niveles mínimos de 7,7 mil millones de barriles, 4 mil millones menos que en 2008. [29]

Como suele suceder en esta época internetizada, en tiempo real y después de haber escrito lo anterior, llega una confirmación detallada:

(Reuters) - La compañía petrolera nacional mexicana Pemex produjo casi un 3% menos de crudo en octubre en comparación con el mes anterior, ya que la empresa muy endeudada lucha por revertir una caída prolongada de la producción.
La producción promedió 1,66 millones de barriles por día (bpd) el mes pasado, o alrededor de 50.000 barriles menos que en septiembre.

En comparación con el mismo mes del año pasado, la producción de petróleo de Pemex en octubre bajó un 5,5%.

La compañía produjo 3,4 millones de bpd en 2004, pero la producción ha disminuido constantemente cada año desde entonces. La deuda de Pemex ha crecido dramáticamente a poco menos de $ 100 mil millones al final del tercer trimestre.

Mejorando lo presente y como una muestra de la perspicacia y conciencia de la realidad de nuestros coterráneos dirigentes petroleros, concluyo la cita del reporte:

El presidente ejecutivo de Pemex, Octavio Romero, ha anunciado en otras ocasiones este año que la producción de petróleo de la compañía se ha estabilizado, al tiempo que pronosticaba que debería estar produciendo alrededor de 1,8 millones de bpd para fines de este año.[30]

En conclusión, y retornando a la razón de ser nacional de este trabajo:
La administración y manejo de los recursos hidrocarburíferos venezolanos,  el papel que la industria levantada en torno a ellos ha de jugar en el destino del país, constituyen, a la manera de Pero Grullo, una materia del más alto interés nacional,  sobre la cual no se pueden tomar decisiones alegres, ni motivadas por consideraciones de parcialidad política o ideológica. Mucho menos por intereses económicos particulares de los validos del poder.

Aunque pueda parecer imposible en el crispado y radicalizado ambiente político actual, esas decisiones deben ser el producto del más amplio consenso nacional, con pleno conocimiento de causa y conciencia de su significación estratégica para la Nación venezolana.

La seriedad del tema me hizo desistir inicialmente de la tentación de colocar una imagen del Coyote manipulando chapuceramente una herramienta A.C.M.E. porque, en verdad,  nuestros Correcaminos, soberanos colectivos, han sido ancestralmente desplumados y asados a la parrilla por Coyotes particulares, propios y extraños, competitivos y modernos. 

Ahora, revisando esta entrada en febrero de 2020, abandono esa decisión y caigo en la tentación, para justificar el título ante los más jóvenes que tal vez nunca vieron la tira cómica.



-      cmp/27/11/2019




[1]  Con mucha seriedad y triste ironía.  Desde el terror E.A. Poe, a las comiquitas de El Correcaminos y el Coyote.

[4] González Cruz, Diego, PROPUESTAS PARA VENEZUELA, CÓMO RESCATAR A LA INDUSTRIA PETROLERA NACIONAL,  

[5] Op. Cit. Cap. 7,  ¿Qué hay que cambiar?”  Pág. 26.

[8] González Cruz,   UN BUEN EJEMPLO DE UNA AGENCIA REGULADORA  http://petroleumag.com/wp-content/uploads/2019/09/Barriles-de-Papel-No.-185.pdf

[9] González Miranda, Rufino. Estudio  acerca del régimen legal del petróleo en Venezuela.  UCV, Facultad de Derecho.  Colección de Estudios Jurídicos.  Vol. XXI. Caracas 1958. Págs. 20-25. “…el derecho de propiedad debe ceder a la utilidad pública “.

[10] Mendoza P. Carlos: “De las Concesiones a los Contratos…”, https://petroleovenezolano.blogspot.com/2009/12/de-las-concesiones-los-contratos-vision.html#.XeBxU5NKjIU
Caracas 1986,  “El Poder Petrolero y la Economía Venezolana”, CDCH-UCV, Caracas 1989. 
Recopilados parcialmente en “Nacionalismo Petrolero venezolano en cuatro décadas”. Banco Central de Venezuela, Colección Venezuela y su Petróleo, Caracas 2017. http://publicacionesbcv.alejandria.biz/cgi-win/be_alex.cgi?Documento=T210000170350/0&Nombrebd=BCV&CodAsocDoc=6185&DSalida=CRes&Sesion=1795489705&DSalida=CRes

[11] González Cruz, Diego:  “Cambios institucionales que desmantelaron y destruyeron la estatal PDVSA”.  En Oliveros, Luis, Coordinador, “La industria petrolera en la era chavista, crónica de un fracaso. Caracas 2019.

[18] Para dar una idea de la desproporción de este  promisor descubrimiento:  En 1922 el “Reventón” del pozo  Los Barrosos No. 2, en el Campo La Rosa, de Cabimas, expelió 10.000 barriles diarios durante 10 días. En 1983, los pozos descubridores del Campo El Furrial producían a una tasa de 13.000 bariles diarios.
Los campos del Magdalena Medio se encuentran dentro de las reservas ya estimadas del país, 0,1% de las mundiales.

[25] Esta mención beisbolera, puesta de moda en nuestro país respecto a PDVSA en los años 80 por Alberto Quirós Corradi , Humberto Peñaloza, Humberto Calderón Berti y posteriormente Luis Giusti, para la promoción de la “apertura petrolera”, constituye un poderoso indicio de la ya reconocida asesoría meritocrática criolla en los hipnóticos proyectos colombianos: Remember Pacific Rubiales.

[28] Ibíd.

[30] REUTERS  25 de Noviembre/ CARLOS JASSO